Cuando comencé a hacer los diarios de naturales con mis hijos, yo
quería hacerlo todo. Esperaba que al fin del año sus diarios
lucieran lo más parecido al de Edith Holden´s; con pinturas bellas,
palabras en Latín, poesía y descripciones. Rápidamente aprendí
que estaba haciéndolo todo mal y necesitaba darle a mis hijos el
tiempo de desarrollar ciertas habilidades e intereses. Así que hoy,
voy a explicar los pasos simples y progresivos que usamos basados en
los escritos de Charlotte Mason, enfocándonos en la primer
etapa en que los niños están entre las edades de seis a
diez años.
No envíes a tus hijos afuera. Sal
con ellos.
Durante
la primer etapa, nos concentramos en
aprender a ver e identificar. No
mando a mis hijos salir afuera, salgo con ellos, y hago mi diario al
mismo tiempo que ellos. Hago esto una vez a la semana por casi 40
minutos. Creo que esto es CRUCIAL para capturar la curiosidad por el
mundo natural cuando hay otras tantas actividades entretenidas que
compiten por su atención. Muchos de nosotros, como educadores, puede
que no nos entusiasmemos haciendo esto porque nuestras vidas también
están demasiado ocupadas, o tenemos nuestra curiosidad a lo natural
cerrada por nuestras experiencias miserables en contacto con la
naturaleza. Si tú te disciplinas a tí misma para hacer esto una vez
a la semana, tu amor por el mundo natural florecerá y agregará
belleza
a
tu vida.
Mantén tus
objetivos en mente, pero se flexible.
Comenzamos con algo simple y seguimos con naturaleza más compleja.
No dibujamos paisajes, sino un espécimen natural a la vez.
Uno de mis objetivos es que identifiquemos y observemos unas 18
plantas y animales a lo largo del año. Algunos de estos ocurren
naturalmente através de la semana, mientras juegan afuera. El resto
ocurre durante nuestras caminatas semanales en la naturaleza. Espero
poder registrar 12 especímenes cada 12 semanas, pero lo más común
es que registremos menos que eso. De todos modos, el tener un
objetivo nos ayuda a alcanzar más que si no ponemos uno. A veces soy
muy específica acerca de lo que vamos a buscar. Otras veces, cuando
los niños están muy felices explorando por su cuenta, pongo a un
lado mis objetivos y los dejo elegir lo que les gustaría observar y
dibujar. Lo mezclo y los mantengo adivinando que van a hacer.
Trátalo como
una búsqueda del tesoro.
El
estudio de la naturaleza debe ser divertido. Lo encaro como si fuese
una búsqueda del tesoro y lo mantengo sencillo. Cualquier
información debe ser
natural y no obstruir. No tengo que ser la maestra que se lo sabe todo, sino que
aprendo al lado de mis hijos. Mi entusiasmo es contagioso, así como
también mi aburrimiento; los niños reciben su amor o su desprecio
por la naturaleza notando mi diaria actitud hacia ella, porque ¡me
están mirando!
Utiliza buenas
guías para identificar.
Invierte en buenas guías de campo y enseña a tus hijos cómo
usarlas. Las guías de
National Auborn Society
son nuestro recurso de identificación favorito. Si no tienes otros
libros para el estudio de la naturaleza, ¡entonces una colección de
buenas guías de campo es la solución!
A veces nosotros llevamos los libros afuera con nosotros, y
dependiendo del tiempo, otras veces traemos el espécimen dentro para
identificarlo. Cada vez que vamos de acampada, o de excursión, o de
picnic, traemos unas cuantas guías también. Estas son uno de mis
recursos más importantes.
Enséñales a
dibujar los espécimenes observando cuidadosamente
“Los
niños deberían observar pacientemente y en silencio, hasta que
aprendan algo de los hábitos y de la historia de la abeja, la
hormiga, la abispa, una araña, del peludo gusanillo, de la libélula
y cualquier cosa más grande que se les ponga en el camino.”CM
Si encuentran un insecto o animal, los aliento
a observarlos como trabajan y ver lo que están haciendo. Si es una
planta, ponemos atención en dónde está localizada (pantano,
bosque, pradera, etc...) Los pájaros usualmente no permanecen
quietos lo suficiente para poder dibujarlos tan bien, así que si
vemos uno “nuevo” afuera, observamos sus hábitos y luego lo
dibujamos de nuestra guía de campo.
Cada
niño tiene una lupa para sí. Pero dibujar la naturaleza merece un
escrito para esto exclusivamente, así que hablaré de esto pronto y
mostraré como enseñar a tus hijos a hacerlo, incluso si tú no
dibujas bien. Por ahora fíjate que mientras los niños aprenden a
ver, aprenderán cómo dibujar naturalmente. Charlotte Mason dijo,
“...Es
sólo lo que verdaderamente hemos visto, lo que verdaderamente
podemos reproducir; así pués, la observación es enormemente
entrenada por la enseñanza del arte.”
Mantén
la escritura breve. Simples nombres son suficiente.
Los niños pasan mucho trabajo aprendiendo a escribir durante estos
primeros años. Este es un proceso muy dificultoso y soy cuidadosa de
minimizar la cantidad de escritura que espero de ellos. Los
educadores CM prefieren
calidad sobre cantidad.
Cuando se trabaja en el diario de naturales mis niños se enfocan en
dibujar, nombrar y pintar lo que encuentran y no pasamos mucho tiempo
escribiendo las descripciones. En lugar de ello, ellos narran
oralmente lo que han observado. Charlotte Mason recomendaba a las
madres escribir las observaciones de sus hijos por ellos. Recuerda,
esta etapa es principalmente acerca de aprender a disfrutar la
naturaleza através de la observación y la identificación. Luego
podremos agregar las cosas más elaboradas.
Finalmente pintamos con acuarelas de
buena calidad, dependiendo las edades de los niños. No recomiendo
los crayones porque estos no se mezclan lo suficiente, y es muy
importante lograr los colores apropiados para el aprendizaje del
hábito de la atención.
Comenzamos
con los lápices acuarelados y seguimos con las acuarelas. La clave
para hacer una buena acuarela de pincel seco es no utilizar demasiada
agua. CM alentaba a los niños a pintar la imagen sin siquiera
dibujar con un lápiz primero. Hemos hecho esto, pero preferimos
dibujar y luego pintar. Creo que las técnicas y medios del arte han
avanzado bastante desde su tiempo y ella probablemente hubiera
alterado algunas de sus recomendaciones. También noté mientras
observaba diarios de naturaleza actuales de sus estudiantes
(disponibles
online en Redeemer College)
que varios estudiantes dibujaban sus especímenes antes de pintarlos.
Así que claramente esto no era una regla fija.
Sólo
hazlo.
Si
queremos desarrollar el amor por la naturaleza en nuestros niños, el
estudio de esta debe ser, al menos, una actividad semanal. Para
lograrlo, la mayoría de nosotros necesitamos hacerlo corto y
sencillo. Charlotte Mason lo hacía simple también y esto es por lo
que me gusta su plan. No es necesario un “currículo” de
naturales. Tú puedes
hacerlo elavorado, especialmente si eres experta en este área, pero
NO es requerimiento para una educación felíz y completa. No hay una
forma correcta de hacer los diarios a la manera “Charlotte
Mason”.
Si llegaste a un buen plan, ¡maravilloso! Quédate en él. Si estás
frustrada por tus esfuerzos en hacer estos diarios de naturales, tal
vez estas ideas te ayuden a simplificar y organizar tu mente. Lo
importante es ya no ponerlo a un lado hasta lograr el plan perfecto.
Sólo sal afuera y hazlo.
Un paso a la vez...