¿Tienes
algún niño que parece no disfrutar de su diario de naturales?
¿Dibuja sus especímenes en unos minutos y enseguida está listo
para hacer otra cosa porque la actividad lo aburre? Este es un
comportamiento normal de los niños en la primer etapa de los diarios
de naturales. Debemos ayudarlos a pasar esta primera fase inicial, o
puede que nunca aprendan a disfrutar de la naturaleza. Charlotte
Mason escribió que no deberíamos utilizar el estudio de naturales
con el objetivo de dar lecciones de dibujo, sino que el hacer los
diarios sea para los niños la manera natural de aprender a dibujar;
ellos sólo necesitan aliento en observar muy de cerca lo que están
tratando de copiar en el papel.
Un buen artista
es simplemente uno que ha desarrollado la habilidad de ver los
detalles de algo. Por ejemplo, cuando alguien que no es artista
intenta dibujar una pelota roja, él comienza por dibujar un círculo
y luego lo colorea con rojo. El artista, en cambio, nota que no es un
círculo, sino una esfera. Dibuja la esfera poniendo atención a cómo
la luz recae en un lado y las diferentes gamas de rojo alrededor
alcanzan gradualmente la oscuridad. Él también nota que hay una
sombra oscura en la base y dibuja eso también. Él ve lo que el ojo
sin esta habilidad no alcanza a ver.
Podemos enseñar
a nuestros hijos a hacer lo mismo através de los diarios de
naturales. Para ilustrarte el punto, supongamos que mi hija y yo
hemos vuelto de una caminata de naturales y ella escogió una "Black eye susan" (rudbeckia bicolor) para dibujar y
pintar. Se sienta, la pone delante de ella y dibuja una linea larga,
seis pétalos ovalados con un círculo en el medio, y una hoja a un
lado. Ella termina en tres minutos y está lista para pintarlo. Aquí
está la conversación que tendría con ella para ayudarla a observar
mejor lo que está dibujando:
Está bonita
la flor que has dibujado, pero creo que te faltó algo. Usa la lupa y
mira con más detenimiento el tallo.¿Qué es lo que ves?
¡Pelo!
Si. Hagamos
esos pelitos. Ahora mira en el centro de tu flor. Dibujaste un
círculo, pero mira el de la 'Black eye' ¿Qué ves en el centro?
Cosas rizadas.
¡Bien! Vamos
a dibujar esos pelitos rizados. ¿Ves algo más entre los pétalos?
Hojitas
verdes.
Esos se llaman sépalos.
Dibujemos esos también. ¿Hay algo en esos sépalos?
No.
¿Por qué no
utilizas tu lupa?
Está bien.
¡Espera un minuto! Hay una pequeña línea en el medio.
Bien entonces,
vamos a dibujarla. ¿Y qué de la hoja que dibujaste? Usa tu lupa y
mírala cuidadosamente.
¡Wow! Hay un
montón de línea pequeñas todo a su alrededor.
De hecho, esos
son pequeños tubos que llevan la comida a la planta, así crecerá.
Hagamos esos con lápiz muy suave.
Luego comenzaríamos a pintar nuestra flor y la ayudaría a ver las
diferentes gamas de amarillo y verde preguntándole de nuevo mientras
ella pinta.
Después de
varias lecciones como esta, mi hija comienza a observar la naturaleza
de más cerca cada vez que dibuja. Ella disfruta mucho más de esto
que de dibujar rápido una cuantas formas y pintarlas con colores
básicos; es porque así se le exige a su pensamiento, y los niños
naturalmente aman ser estimulados intelectualmente.
La próxima vez
discutiremos la segunda etapa de los diarios de naturales, para los
niños más grandes.
Un paso a la vez...