Hace años cuando mis hijos eran
pequeños, devorábamos varios libros en una semana. Era un tema de
orgullo para todos nosotros. ¡Qué bien!, pensaba, mis
hijos deben estar aprendiendo mucho. Ellos vieron tantas ideas este
año.” Mi hija podía terminar un libro por día. Y luego leí esto:
“Escuchamos lo de 'tres libros a
la semana' como algo usual y de hecho algo de que sentirse orgulloso.
Pero eso, de nuevo, proviene de nuestra tendencia a despreciar el
conocimiento, y a perder de vista su fuente alimenticia. Si
percibimos que el conocieiento, como el pan, es una comida
necesaria, también vemos que debe ser tomado en porciones;
combinadas a medida, servida sdebidamente y con intervalos para así
provocar el proceso digestivo, sin el cual el conociemiento, como la
carne, nos da trabajo en lugar de fortaleza.” (vol 5 de CM Series)
Nunca habría
escuchado tal consejo, pero vivir en Turquía tiene sus desventajas.
No tenía bibliotecas ni librerías con libros disponibles en idioma
Inglés. Mis hijos, por su necesidad, iban a tener que extender sus
libros. Nunca podía suplir la demanda. Decidí tratar esto con sus
libros más importantes, los libros que consideraba “la frutilla
del postre” por un período de varias semanas. Así que en lugar de
leer un libro o dos a la semana y luego pasar al siguiente, mis hijas
comenzaron varios libros al mismo tiempo pero los leían lentamente,
en un período de 10 semanas o más.
Comencé a notar
que mis hijos estaban hablando en la cena de los personajes y de los
episodios de los libros que habían leído. Estaban actuando esas
historias, entre ellos las incluían en sus juegos. Incluso
comenzaron a escribir sus propias historias, sin pedírselo, copiando
la idea principal y el estilo del libro que estaban leyendo. ¡Qué
bueno! Mis hijos estaban disfrutando sus libros mucho más desde que
tenían el tiempo de rumiar y vivir los personajes y las ideas
expresadas allí en sus páginas. No sólo eso, las recordaban, y
durante los años siguientes aún recordaban pequeños detalles, y
estaba poniéndose en su lugar un aprendizaje duradero, de una forma
entretenida y sin apuros.
Si tienes dudas de
tratar esto, tal vez puedas probar este año con los libros de tus
hijos y observarás resultados interesantes.
Un paso a la vez...